¿Quien te ha hecho daño?

Decía la abuela de Betty, que por supuesto era bruja, que si alguien te había hecho un daño o echado una maldición, para averiguar quien había sido debías calentar un huevo y ver allí la cara de quien lo hizo.
Es decir pones agua a calentar y cuando esté bien caliente sin dejar que hierva, la retiras del fuego y colocas el huevo dentro, al cabo de unos segundos lo sacas y lo rompes y la yema junto con la clara formaran los razgos de aquella persona que te ha hecho mal.